Rutinas Diarias y Cambios Estacionales
En Sol Azul Oysters, valoramos cada día que contribuye a entregar ostiones de la más alta calidad y sustentabilidad a nuestros clientes. Ubicada dentro del Patrimonio Mundial de la UNESCO de la Reserva de la Biosfera de El Vizcaíno, nuestra granja no solo apoya el crecimiento de ostiones exquisitos, sino que también respeta y protege un ecosistema complejo. Aquí te enseñamos una pequeña muestra de la vida diaria en nuestra granja de ostiones, donde tanto los ostiones como nuestro dedicado equipo prosperan en armonía con la naturaleza.
Mañana: La Marea Dicta el Inicio
Nuestro día comienza con la marea, no con el reloj. La configuración geográfica única de la Laguna San Ignacio nos permite utilizar tecnología innovadora de cultivo sobre el lecho marino. Aquí, nuestros ostiones están asegurados en bolsas de malla y colocados en estantes, elevándolos del lecho marino. Esto los protege de los depredadores y promueve un crecimiento más saludable, ya que no están enterrados en el lodo o la arena, sino que se bañan en aguas ricas en nutrientes. A medida que la marea sube, estas aguas, frías y llenas de fitoplancton provenientes de surgencias oceánicas profundas, envuelven a los ostiones. Es entonces cuando nuestros ostiones, actuando como filtros naturales, absorben nutrientes esenciales y se limpian a sí mismos, contribuyendo a su perfil de sabor limpio, dulce y ligero.
Tarde: Entrenamiento y Mantenimiento
Durante la marea baja, nuestros ostiones experimentan horas fuera del agua, lo cual es crucial para su habilidad de cerrarse herméticamente y almacenar agua de mar limpia entre sus valvas, una habilidad que deben dominar para sobrevivir y mantenerse frescos desde la cosecha hasta la entrega. Este tiempo también permite a nuestro equipo realizar el mantenimiento esencial de la granja. Los estantes son inspeccionados y reparados, y las bolsas se revisan para asegurar que estén seguras y libres de cualquier amenaza potencial.
Finales de Verano: Una Temporada para Descansar
Los meses de finales de verano traen un ritmo único a Sol Azul Oysters. A medida que las temperaturas del agua en la Reserva de la Biosfera de El Vizcaíno aumentan, nuestros ostiones comienzan su proceso natural de reproducción. Este período exige mucho a los ostiones ya que gastan energía significativa. Para protegerlos durante esta fase vulnerable, pausamos la producción. Esto no solo asegura el bienestar de nuestros ostiones, sino que también permite a nuestro personal tomar descansos bien merecidos, reforzando nuestro compromiso tanto con el bienestar ambiental como con el de los empleados.
En Sol Azul Oysters, cada día es un paso en nuestro viaje para proporcionar no solo alimentos, sino un testimonio de acuicultura sostenible y de calidad que honra nuestro planeta y sus preciados recursos. Ya sea la rutina diaria o las adaptaciones estacionales, la vida en nuestra granja de ostiones es sobre armonía y sustentabilidad.